Si quieres conseguir un pelo muy sedoso y brillante apúntate este truco: añade dos cucharadas soperas de miel por cada litro de tu champú habitual. Agita la botella para conseguir que se mezcle bien y conseguirás un champú con acondicionador que te proporcionará unos resultados más que satisfactorios. Nunca más tendrás que sufrir al desenredarte el pelo después de la ducha.
F:mujer.orange.es